Yo sigo creyendo que el amor es cuestión de decisiones. Hay que dejar de lado el veneno y la daga y buscar tu propio final feliz. Casi siempre. Pero, a veces, a pesar de decidir lo mejor que puedes y de tus intenciones, el destino termina por ganar.
-Te echo de menos.
-No puedo.
-Te echo de menos.
-No puedo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario